
En esta ocasión no fuimos a ningún restaurante, pero quien quiere ir a un restaurante teniendo la oportunidad de degustar unos aperitivos
riquísimos, regados con un buen vino y seguidos de una ensaladilla, pero el plato fuerte, unos Canelones dignos del
mismísimo compositor
Gioachino Rossini de quien se dice que, además de tener muy buen gusto en su paladar, era un excelente cocinero y dicho sea de paso, al que se le atribuye el perfeccionamiento o
invención de los canelones.
Qué
se puede decir del entorno, la casa preciosa y en uno de los mejores sitios de La Isla, a 20 metros de la playa. En fin nos encantó el sitio y Felicitaciones para Ana "la
Chef" y
Queco que se ocupó en todo momento de que no nos faltara nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario